La comida callejera ecuatoriana está viviendo una transformación audaz. Platos como los chifles, las empanadas de viento y las salchipapas están siendo reinterpretados por chefs en ciudades como Quito y Guayaquil, elevándolos a nivel gourmet sin perder su esencia popular.
Platos que cruzan formatos
- Chifles servidos con emulsiones de ají, polvo de camarón seco y cremas de aguacate.
- Empanadas de viento rellenas de queso curado, cebolla caramelizada y acompañadas de salsas de maracuyá o ají amazónico.
- Salchipapas con papas nativas, salchichas artesanales, reducción de tomate de árbol y mayonesa de cúrcuma.
En Quito, espacios como Urko, Nuema y Chulpi Urbano están llevando la cocina ecuatoriana a un plano contemporáneo, reinterpretando recetas populares con técnicas de alta cocina3. En Guayaquil, locales como La Pata Gorda y Chief Smokehouse integran ingredientes callejeros en menús de autor.
Cultura urbana y turismo gastronómico
La comida callejera gourmet se ha convertido en atractivo turístico. Videos virales, rutas gastronómicas y festivales como el Guayaquil Street Food Fest celebran esta evolución, conectando tradición, creatividad y experiencia urbana. En cada bocado hay historia, técnica y una apuesta por dignificar lo cotidiano.