La provincia de Loja está consolidándose como un destino gastronómico de alto valor cultural. Su cocina, rica en sabores autóctonos como el cuy, el maíz, las frutas andinas y las carnes curadas, atrae a turistas nacionales e internacionales que buscan experiencias auténticas y profundamente conectadas con el territorio.
Platos que narran la memoria lojana
- Cuy asado y gallina cuyada, preparados con aliños tradicionales y cocinados en manteca de chancho, son platos emblemáticos que se sirven en espacios como Mama Lola, Salón Lolita y El Recreo.
- Cecina de Catamayo, lomo de cerdo curado y dorado, se acompaña con yuca, arroz y curtido de cebolla.
- Sango de maíz, repe lojano y chanfaina de Celica son recetas que combinan ingredientes locales con técnicas ancestrales, y se sirven en mercados, ferias y restaurantes familiares.
Rutas como “Gastronomía de nuestros cantones” permiten al visitante recorrer pueblos como Zapotillo, Calvas y Chaguarpamba, degustando platos como el chivo al hueco, la madre olla y el molloco de plátano. Cada parada es una inmersión en la historia, la biodiversidad y el afecto de la cocina lojana.
Restaurantes que sostienen la tradición
Establecimientos como Mama Lola y Salón Lolita han mantenido viva la cocina lojana por generaciones, ofreciendo ambientes coloniales, recetas heredadas y atención familiar. Son espacios donde el sabor se convierte en experiencia.
La gastronomía de Loja no es solo alimento: es identidad, memoria y hospitalidad. En cada plato hay una historia que merece ser vivida, cocinada y compartida con el mundo.