Existe una fruta exótica de la familia de las pasifloráceas que es cultivada en las zonas tropicales de América. De seguro conoces la granadilla y el maracuyá, ellas también son pasifloráceas, se dice que este nombre nació de unos misioneros españoles que encontraron en las flores de estas frutas los elementos de la pasión de Cristo (clavos, corona de espinas en sus pétalos, cádiz, las cinco llagas en los estambres y la lanza en la hoja). La badea, la granadilla y el maracuyá son muy diferentes pero sus semillas internas son su característica común.
El origen de la badea es en Sudamérica y en Ecuador es producida en mayor volumen en las provincias del Guayas y LosRíos y, si es cultivada correctamente, está presente durante todo el año.
Es grande y ovalada, su color verde se torna amarillo cuando llega a la madurez. Cuando aun no está madura la pulpa suele ser utilizada como verdura en sopas y luego, una vez madura, la fruta dulce se come fresca o en jugos. La pulpa blanca, suave y jugosa posee semillas por dentro que están recubiertas con un material gelatinoso y algo ácido de tono naranja. Al preparar el jugo se utiliza la pulpa y las semillas lo que permite que produzca una sensación de saciedad. Adicional, se la utiliza para preparación de postres, salsas y mermeladas.
Beneficia al sistema nervioso y digestivo, del mismo modo, protege los huesos, controla los niveles de colesterol, y posee vitamina E que fortalece nuestra piel.
Diana Ramírez R.
